¿Alguna vez no os habéis preguntado que ocurre cuando nos rompemos un músculo, o cuando nos hacemos una esguince? Parece casi magia como al poco tiempo de lesionarnos, si todo va bien, volvemos a estar exactamente igual que antes y sólo queda un vago recuerdo del daño producido.
La verdad es que el tema de la recuperación de partes blandes es a la vez extremadamente bonito y extremadamente complicado. Es espectacular ver como este proceso sigue unas fases muy determinadas y ajustadas en el tiempo y cómo en cada una de estas fases ocurren múltiples procesos metabólicos.
Uno de los temas más relevantes sobre este tema descubiertos recientemente, es la identificación de dos moléculas corporales endógenas: las Lipoxinas, sustancias endógenas moduladoras de la inflamación más potentes que existen, y las Resolvinas capaces de inducir el cambio de una fase inflamatoria a otra de regeneración. Para los impacientes una muy buena publicación sobre el tema la encontrareis en Chiang N, Arita M, Serhan CN Prostaglandins Leukot Essent Fatty Acids. 2005. Pero antes de todo esto es importante conocer qué ocurre exactamente y qué podemos hacer para apoyar el proceso.
Cuando me lesiono
Al lesionarnos lo primero que ocurre es que el cuerpo necesita aislar la herida y qué sustancias primero de defensa (para cubrir el riesgo de infección) y luego reparadoras llegan a la zona lesionada de manera fácil y rápida. Por lo tanto, en un primer momento todos los recursos son movilizados para evitar el sangrado y una vez producido el coágulo se inicia la movilización de células y mediadores a la zona, este proceso se consigue mediante la vasodilatación de vasos vecinos para permitir el tráfico celular. Una vez las células han llegado a la región se distribuyen el trabajo por tiempo y necesidades de una manera muy específica. Así, unas células se encargan de eliminar posibles patógenos que hayan infiltrado la herida, otras eliminarán posible tejido dañado aunque no haya necrosado completamente (cortar por lo sano) y otros van fabricando el nuevo tejido primero de manera provisional y luego definitivamente.