Hoy os hablaré de un concepto del que seguramente muchos no habréis oído hablar: El esquema corporal (EC). El EC, lo podemos entender como la conciencia que tenemos de nuestro propio cuerpo. O sea, el tener conocimiento de lo que hacemos o tenemos que hacer. Cuanto más conocimiento tengamos sobre él, mejor rendimiento de nuestro cuerpo podremos obtener.
En concreto nos estamos refiriendo al conocimiento que tenemos de forma inmediata y continua de nuestro cuerpo, en estático o en movimiento, en relación con el espacio y con los objetos que nos rodean.
Si yo le digo a un niño pequeño que lleve su mano izquierda a su oreja derecha o bien que intente llegar del punto A al punto B haciendo exactamente 4 pasos justos, seguramente tenga problemas para realizar estas tareas. Eso es porqué aún no tiene un EC bien definido, no tiene mucha conciencia de su propio cuerpo. Un adulto obviamente tendrá más facilidad para hacer estas tareas, pero no todo el mundo, por más adulto que uno sea, tiene un buen EC. ¿Alguien, martillo en mano, en lugar de dar en el clavo le dio en su dedo? Pues eso es tener una mala definición de su EC.
Es vital tener un EC bien definido. De no ser así, podemos tener una serie de déficits (Camerino y Castañer 1991):
- Déficit en la percepción: déficit en la estructura espacio-tiempo (voy a chutar un balón y no doy pie con bola, o voy a rematar y salto antes de tiempo).
- Déficit en la motricidad: torpeza, malas actitudes (me martilleo mi dedo).
El tener un buen EC corporal es clave para nuestra suerte deportiva. No me imagino un jugador de voleibol saltando 1 segundo antes para rematar un balón, como tampoco me imagino un futbolista saltando a destiempo para rematar un córner, ni a un nadador que no coordine brazada con patada. No me lo imagino, porque lo veo prácticamente a diario. Aunque sean deportistas de élite.
Es verdad que el cansancio y la fatiga muscular provocan que cometamos errores que en otras circunstancias no cometeríamos, pero detrás de todo eso hay una mala definición de nuestro EC.
Probad de lanzar una pelota de tenis al aire con una mano y cogerla con la otra, sin mirar la pelota. ¿Difícil? Habrá gente que le salga a la primera y gente que le cueste horrores que le salga bien ni que sea una sola vez. Probad también de hacer lo mismo, pero antes de coger la pelota tenéis que dar un giro de 360ª. Será aún más difícil pero seguro que a muchos os sale a la primera. Sencillamente se trata de tener una buena conciencia corporal. Quien tenga bien definido su EC, justo en el momento de lanzar la pelota de tenis, sabrá donde esta va a caer y sabrá poner la mano en ese sitio para cogerla. El rematador de voleibol sabrá donde y cuando tendrá que saltar exactamente para rematar el balón que le envía su colocador justo en el momento que él le coloca el balón y el bateador de béisbol sabrá apreciar correctamente la trayectoria que le da el pitcher a la pelota y podrá batear correctamente.
Como podéis ver, un buen EC es de vital importancia para un deportista bien sea futbolista, baloncestista, tenista…. ¿Pero es igual de importante para los runners, ciclistas, nadadores…?
En estas 3 disciplinas no interactuamos directamente con nuestros rivales, pero tener un buen EC también nos va a ayudar.
- Podemos ser noveles en esto del triatlón y la natación nos puede costar. Nadar correctamente un estilo (pongamos el crol), no es fácil. Cuando nadamos involucramos todo el cuerpo a la vez. A parte de tener el cuerpo en posición horizontal (ya por eso, se requiere de un cierto esfuerzo y buena conciencia corporal), los brazos alternan sus funciones y las piernas igual. Una mano entra en el agua, se desliza, agarra, tira, empuja dentro del agua mientras el otro brazo está en la fase aérea mientras las piernas van pateando alternativamente. Y todo eso con su técnica. A parte, tengo que respirar y armonizar todo el movimiento. A muchos adultos les cuesta dominar la técnica. Por más que su entrenador les explique y enseñe como hacer un buen recobro o una buena entrada de la mano en el agua, si no tienen un buen EC ,no llegan nunca a dominar la técnica.
- ¿Quién no ha tropezado alguna vez mientras corría? ¿Quién no ha visionado una caída un segundo antes de producirse? Un buen EC nos puede ayudar a evitar este tipo de accidentes. A lo mejor hemos pisado un pequeño bache o una piedra se ha cruzado en nuestro camino. Esto nos puede hacer desequilibrar nuestro cuerpo y nos encontramos con dos posibles escenarios:
- Caernos al suelo.
- Sobreponernos al incidente y continuar como si nada.
Lo bueno sería la segunda opción obviamente. Un buen EC en este caso me permitiría no desequilibrarme, saber como tengo que poner mi cuerpo para no perder el equilibrio, saber donde tengo que pisar y como, y así poder continuar con mi marcha sin mayores problemas que un simple susto. Un buen trabajo de propiocepción, como ya comentamos en otro post, me ayudaría aún más. O sea, gracias a una buena percepción de la situación y a una posterior buena decisión, me permitiría no tener ningún problema. Todo ello, combinado con un excelente dominio y conocimiento de nuestro propio cuerpo.
Esto sería extrapolable a ciertas situaciones de riesgo para los ciclistas (cuando bajan por una montaña, por ejemplo) o para los que compiten en motos o coches. Situaciones límite que reaccionando a tiempo o simplemente sabiendo como reaccionar nos evitaremos serios problemas.
Un punto importante aquí es la apreciación de trayectorias. Si anticipo la trayectoria de una balón que va hacia mi, por ejemplo, o bien si soy capaz de coger correctamente una curva (porque la he interpretado bien), las posibilidades de éxito suben considerablemente.
Pero todo en esta vida se aprende. El EC es algo que ya se trabaja en la escuela, dentro de la Educación Física, pero de adultos también lo podemos trabajar. Y lo podremos hacer incidiendo en estas áreas:
- Conocimiento del propio cuerpo. Sería básico practicar el máximo número de deportes, en diferentes situaciones, con distinto material. Sin ningún otro afán que el de experimentar y disfrutar haciendo deporte. Cuantas más experiencias motrices tengamos, mejor conoceremos a nuestro cuerpo y mejor nos responderá él en un futuro. El cuerpo tiene memoria motriz. Si yo en mi vida he rematado 5000 balones de voleibol, el día que me coloquen el balón número 5001 tendré más papeletas para hacerlo bien que el que sólo ha rematado 200 balones.
Si nos centramos en el mundo del TRI, recomiendo correr en diferentes superficies, con diferente calzado, nadar en aguas abiertas, en piscinas, probar diferentes bicis… En definitiva, dotar a nuestro cuerpo de cuantas más experiencias motrices para así hacerlo más eficiente en cualquier acción venidera.
- Educación de la actitud. Es la predisposición a hacer algo. Antes de hacer un movimiento o acción, mi cuerpo se prepara, se pone tenso, duro, presto a hacer esa actividad. Para tener una buena actitud es necesario una buena percepción de la situación y un control del cuerpo combinado con una buena condición física. Así, mi actitud será más buena y por lo tanto obtendré una mayor efectividad en lo que tenga que hacer.
- Equilibrio. Hay dos tipos de equilibrio: el estático y el dinámico. Si somos conscientes de la posición de nuestro centro de gravedad y de nuestra base de sustentación, conseguiremos tener más equilibrio y por lo tanto mayor definición de nuestro EC. Trabajando la propiocepción podremos conseguirlo, además de evitar muchas lesiones. Muchas caídas en bici se producen por no tener un buen equilibrio.
- Respiración. Aunque no lo parezca la respiración también juega un papel muy importante en nuestro EC. Si no respiramos bien, ejecutaremos mal cualquier tarea motriz. Los que nadáis sabéis que si no respiráis bien, técnicamente empezáis a nadar de otra forma. O el fatídico penalty que lanzó Djukic cuando jugaba con el Depor. Marcar ese penalty en el último minuto del último partido le suponía ganar la liga. Djukic estaba fatigado, nervioso, le faltó oxígeno. Sólo viendo como cogió carrerilla para chutar se vio que no respiraba bien. Falló y el Depor perdió la liga. Técnicas de respiración varias o actividades como el yoga nos pueden ayudar.
- Relajación. Si estamos relajados nos sentimos mejor con nuestro cuerpo. Y si nos sentimos mejor, rendimos mejor. Estamos distendidos, alegres, más motivados y tendremos más posibilidades de hacer bien aquello, que de hecho, ya sabemos hacer bien, pero que estando nerviosos o fatigados no nos sale tan bien. Clases de relajación o incluso acudir a un psicólogo deportivo nos pueden ayudar a superar situaciones de estrés, que nos hacen rendir menos.
A lo mejor los que sois runners, ciclistas, nadadores, triatletas…todo esto os suene un poco a chino, pero si sois de los que os veis un poco patosos (sobretodo en el agua), si os lesionáis a menudo corriendo o bajando escaleras porque pisáis mal o tropezáis, o bien sois de los que pierde fácilmente el equilibrio con la bici o que no es capaz de bajar una montaña con cierta holgura, seguramente no tenéis bien definido vuestro Esquema Corporal. Trabajando un poco los puntos anteriores, veréis como mejoráis. No todo es tener buena condición física.
Y no me gustaría terminar sin antes poner como ejemplo al gran Michael Jordan., uno de los grandes deportistas de todos los tiempos. Un baloncestista que dominaba como nadie el ritmo del partido, el espacio-tiempo, que tenía un físico espectacular y que era capaz de anticiparse a sus rivales y de preveer cualquier jugada.
Era tan bueno que se permitió el lujo de lanzar un tiro libre con los ojos cerrados. Era un final de partido (partido sentenciado a favor de los de Jordan, pero con el cansancio típico de un final de partido). Un rival le provoca diciendo que no era capaz de lanzar con los ojos cerrados. Jordan acepta la apuesta y encesta.
Claro ejemplo de una buena definición de su EC: buena condición física pese a estar en el final de partido, con buena actitud (un rival le “provoca”; Jordan está ultramotivado), pero también relajado, distendido, con lo cual estaba respirando bien, y simplemente lo que hizo fue ejecutar una acción (tiro libre) que era algo que ya había realizado en miles y miles de ocasiones. Su cuerpo ya sabía de memoria como posicionarse, como tensionarse, como ejercer la fuerza justa para encestar y todo ello combinado con una buena actitud, relajación y distensión se pudo permitir lanzar un tiro libre con los ojos cerrados y tener éxito
Jose Manuel Barrios
28 de marzo, 2012 a las 6:54 pmGran artículo Andres, si me da la autorización pertinente, me lo copio y lo imprimo para llevar y leer varias veces… muchas… creo que lo que hablas es importantisimo y muchas veces descuidamos pequeños detalles que nos harian crecer mas rapidos como atletas, aunque seamos amatersss… Gracias.
Jose Manuel Barrios
28 de marzo, 2012 a las 7:11 pmPerdon, mil disculpas no es Andrés, es ANDREU, lo siento.
Andreu López
28 de marzo, 2012 a las 7:35 pmTranqui, jejeje, es lo que tiene el interés que todos me tienen 😉
El EC puede dar mucho de sí, y son esas cosas que se deberían trabajar en la base y que pocas veces se hacen o bien no se hacen con la conciencia que se debiera.
Simplemente saber que nunca es tarde y que no todo es correr o andar encima de una bici. Otro tipo de entrenamientos que vistos desde fuera ni tienen nada que ver con la nuestra práctica principal, a la hora de la verdad, nos van a ayudar y mucho.
Saludos!
Ángel Bolaño
28 de marzo, 2012 a las 9:02 pmYo debo de ser un bicho raro, es un tema que siempre me ha apasionado y he tratado de mejorar con los años, me fijo constantemente quizá por defecto profesional en como se mueve la gente y sobre todo los niños que hacen deporte, hay muy poca base en general y nulo trabajo por parte de la mayoría de los entrenadores de base. Al respecto de esto hay un reportaje sobre cristiano Ronaldo en el que se ve algo de lo que tu hablas, os dejo el enlace de la primera parte, luego solo pinchar en las otras dos, no recuerdo en que parte se ve uno de los ejercicios que le plantean, en el cual primero le centran un balón para que remate, luego le dejan sin luz a la hora de impactar……merece la pena verlo.. http://youtu.be/4lHvFUqqfy8 Gran trabajo como siempre Mister, gracias.
andreu
29 de marzo, 2012 a las 11:56 amPues si, estos vídeos serían ejemplos de como un deportista tiene un buen esquema corporal definido. Hay varios ejercicios que si no es por su buen EC, no los podría realizar.
Saludos!
Ángel Bolaño
29 de marzo, 2012 a las 12:38 pmLa parte que os comentaba es a partir del minuto 5 de este video… http://youtu.be/Z2qDKe2GvYM
Mariano Bf
29 de marzo, 2012 a las 4:02 amHola
Lo que se aprende leyendo este blog, toda la vida pensando que era un patoso y ahora resulta que lo que me pasa es que “no tengo bien definido mi esquema corporal”. Prueba de ello son los dos esguinces de tobillo en lo que va de año…
Gracias
andreu
29 de marzo, 2012 a las 11:58 amSi uno es patoso es por algo. Es como la persona que es obesa y dice que es por genética. Pues no…uno es obeso por lo que come y hace. Otra cosa que es que tengas cierta tendencia a engordar. Sabiendo en lo que fallas, podrás ir trabajando sobre ello y mejorar. Si tienes problemas de esguinces, intenta hacer un buen programa de tonificación y de propiocepción 😉
Saludos!
Mariano Bf
29 de marzo, 2012 a las 3:43 pmHola
En ello estoy, poco a poco.
Gracias
Manel
29 de marzo, 2012 a las 10:02 amHola Andreu,
Gracias por el artículo, está muy completo y muy bien explicado, con respecto a los ejemplos que pones del jugador de Voley, o el gesto de lanzar/recoger la pelota de tennis, ¿no crees que depende en mayor medida de la buena elección del centro de atención que del EC propiamente?.
Lo de Jordan fue inhumano!
Saludos y gracias de nuevo
andreu
29 de marzo, 2012 a las 3:39 pmHola Manel,
Está claro que esto forma parte de un todo.
En los casos que mencionas y de hecho en cualquier situación deportiva, tenemos:
-Mecanismo de percepción: percibo la situación.
– Mecanismo de decisión: en función de lo percibido, decido que y como hacerlo.
-Mecanismo de ejecución: realizo la acción.
¿Que pasa? Pues que puedo percibir bien, puedo decidir bien, pero resulta que técnicamente ejecuto mal la acción. Pero tb puede pasar al revés. Que perciba y/o decida mal, pero que la ejecución (aunque sea un churro), me permita hacer canasta o gol.
Todo es igual de importante. La elección (decisión), obviamente lo es y mucho, pero esta viene determinada por una buena percepción.
Cada caso es distinto y habría que ver donde está el error del deportista, para así saber como solucionarlo. Muchos errores estarán en la fase de decisión, pero otros muchos estarán en una mala perceción o ejecución.
En el tiro libre de Jordan, la percepción es correcta (un tiro libre es un tiro libre, siempre es la misma situación). La decisión, es siempre la misma. Tiene x segundos para tirar. La canasta no se mueve, la distancia siempre es la misma y los rivales no pueden hacer nada. Y la ejecución siempre es la misma (esta vez pero, lo hace con los ojos cerrados, ya que tiene toda la cadena automatizada).
Repito, hay que analizar las cosas primero como un todo, y luego desgranar para ver donde está el error para sí poder solucionarlo.
Saludos!
ANTONIO MADRIÑAN
30 de marzo, 2012 a las 5:57 pmEspectacular artículo Andreu,
en mi campo que son las carreras, creo que un (EC) bueno es muy decisivo y casi indispensable, sobre todo en las carreras de Montaña muy técnicas, en las que debes de visualizar las cosas antes de que ocurran , preveer e intuir incluso lo que no ves, pongamos por ejemplo cuando corres por la nieve.
Siempre me he fijado en estas cosas, y creo que a partir de ahora lo haré más.
Gracias