Cuando hacemos una planificación para preparar una competición (da igual si es una carrera de 10 kms, una maratón, un ironman, la Titan Desert…), debemos tener en cuenta muchos factores. Pero todo lo que hagamos desde que empezamos la preparación hasta el momento antes de iniciar la competición en sí, irá encaminado a llegar en las mejores condiciones posibles al día D. Y punto importante será lo que hacemos unos pocos días antes de la fecha señalada. Nada de lo que hagamos esos días antes nos ayudará a ser más rápidos, pero sí que (según lo que hagamos los últimos días), podemos hacer que la preparación que hayamos hecho se vaya al traste por una mala planificación final.
A esta planificación final (referente a los últimos días), la denominamos Tapering.
La idea del tapering es que el cuerpo asimile todo el trabajo hecho anteriormente en los entrenamientos, que se recupere de ellos y que llegue a la competición en sobrecompensación y por tanto pueda rendir a un nivel superior a lo que venía haciendo en los entrenamientos.
Deberemos entonces, reducir de una forma progresiva pero no lineal la carga de nuestros entrenamientos durante un período variable pero planificado en el tiempo.