El buen tiempo está al caer y con él muchos deportistas saldrán en masa a la calle a hacer deporte. Temperaturas más agradables que invitarán a hacer tiradas más largas en bici o simplemente salir a correr sin que el frío me obligue a acortar el entreno independientemente de si salimos por la mañana o por la tarde.
Para los que nos activemos a partir de este Febrero lo lógico sería ir poniendo una base aeróbica (si es que este mes de Enero hemos hecho poco o nos hemos limitado a hacer algo de cardio en el gim). Muchos empezarán y verán resultados muy pronto. De hecho, partiendo de una base más bien pobre, cuando empezamos a entrenar 1 o 2 días más por semana o bien aumentamos el volumen, veremos como nuestra condición física mejora. Ahora bien, si vamos siguiendo siempre las mismas pautas de entrenamiento, veremos como más pronto que tarde nos estancamos y terminamos sin ver mejoras y yendo para atrás como los cangrejos.
Dentro de la Teoría del Entrenamiento nos encontramos a los llamados principios del entrenamiento. Debemos conocerlos y saberlos aplicar a nuestra realidad.
Uno de estos principios es el de la Progresión. Como decimos, un error que cometen muchos runners o ciclistas es el de salir a entrenar y hacer siempre lo mismo a la misma intensidad. Si uno hace siempre lo mismo, el cuerpo no avanza, se estanca, y un cuerpo que se estanca, retrocede.
Antes de nada deberíamos tener claro algunas cosas:
- En vistas a qué me entreno: maratón, media maratón, carrera de 10 km, duatlón…
- A qué nivel me encuentro actualmente.
- Cuando es la competición: cuantas semanas o meses me quedan.
- Mi disponibilidad para entrenar: horas a la semana, material del que dispongo…
A partir de aquí hay infinidad de métodos para entrenar. Y todos pueden ser muy válidos.
Sin entrar en detalles, puesto que no tendríamos espacio y obviamente no podemos personalizar, la progresión puede venir dada por:
- Aumentar nuestros días de entrenamiento.
- Aumentar el volumen de entrenamiento
- Aumentar la intensidad del entrenamiento
Lo importante es saber combinar estos 3 puntos. Si me preparo para los 10 Km y siempre salgo a correr a media intensidad durante 1 hora, durante la época fuerte de entrenamiento podemos optar por correr menos minutos pero a más intensidad (incluso hacer un trabajo de series), otros días en correr mas minutos, y otras semanas en entrenarnos 1 día más a la semana, teniendo muy presentes los días de descanso.
Para los que hacéis triatlones una opción sería dar más importancia a una disciplina en cada semana. O sea, en la semana 1 haremos dos días de natación más un dia de carrera y otro de bici. Y en la semana dos, haremos dos días de carrera, uno de bici y otro de natación, por ejemplo. Vigilando en no poner en una misma semana un entreno a máxima intensidad de las 3 disciplinas. Nuestro cuerpo no está como para hacer el martes un entreno de natación al 100%, el jueves un entreno de carrera al 100% y el sábado más de lo mismo yendo en bici. Tenemos que dosificar. Si cada semana le damos especial importancia a una sola disciplina veremos como vamos mejorando sin necesidad de sobrecargar a nuestro cuerpo.
La palabra clave es progresión. Y para ello tengo que saber donde estoy ahora mismo y donde quiero estar dentro de un tiempo; que reto quiero realizar, cuando lo tengo que realizar y que marca quiero realizar.
Con los puntos que hemos marcado un poco más arriba y escuchando a nuestro cuerpo podremos ir avanzando poco a poco sin tener ningún problema físico.
Lory
1 de febrero, 2013 a las 1:04 amHola Andreu!
Súper interesante tu post, sobre todo lo que resumes muy bien: “La palabra clave es progresión. Y para ello tengo que saber donde estoy ahora mismo y donde quiero estar dentro de un tiempo; que reto quiero realizar, cuando lo tengo que realizar y que marca quiero realizar”.
Esas palabras son para el deporte, pero también para replantear nuestros estudios, trabajos y hasta nuestras relaciones interpersonales.
Tengo una pregunta. Yo hago abdominales y ejercicios con ligas y pesas después del ejercicio aeróbico o del HIIT. ¿El ejercicio aeróbico -y el HIIT- debe hacerse antes o después de las pesas y abdominales? ¿Hay alguna diferencia si el aeróbico y/o el HIIT se hace antes o después de los otros ejercicios?
Gracias por tu atención y por esas palabras que sirven para replantear nuestros objetivos en la vida.
andreu
8 de febrero, 2013 a las 7:47 pmHola Lory,
Mejor primero el trabajo de fuerza. Si primero haces el cardio, luego cuando hagas el trabajo de fuerza no lo harás al 100%. Y el trabajo de fuerza es realmente efectivo cuando lo haces al 100% y no al 80% por ejemplo.
Lory
11 de febrero, 2013 a las 6:03 amGracias, Andreu, por contestar! Escribes que “Si uno hace siempre lo mismo, el cuerpo no avanza, se estanca, y un cuerpo que se estanca, retrocede” y yo quisiera dejar de hacer lo mismo (HIIT en bicicleta y ligas/pesas) y darle variedad a los ejercicios y a la intensidad de lo que hago.
Mi meta no es bajar de peso (mido 1.68 con 53 kg), sino de adquirir más masa muscular y tener más fuerza, resistencia, agilidad y flexibilidad.
¿Tienes algún post que hayas escrito sobre las ventajas y desventajas del Tabata, Insanity, P90X, HIIT, Tae bo, etc. y de las razones por las cuáles son -o no son- recomendables? Gracias por la información y por tu ayuda.