Empezar a entrenar no es fácil. Sobre todo si nunca hemos hecho actividad física y tenemos sobrepeso. Cuando uno lleva unos cuantos kilos de más encima es realmente duro activarse físicamente. Uno se cansa más, muscularmente se agota rápido y esto hace que mentalmente no estemos preparados. Nos desmotivamos rápido y abandonamos la idea de adelgazar a través de hacer algo de ejercicio. Tener motivación es fácil (un obeso tiene un claro “motivo” para adelgazar), pero la experiencia me dice que uno se desmotiva tan rápido como se motivó en su momento.
Consejos para empezar a hacer actividad física
- Empieza poco a poco: No es necesario empezar con una rutina de ejercicio intensa desde el primer día. Comienza con pequeños cambios en tu rutina diaria, como caminar en lugar de conducir o tomar las escaleras en lugar del ascensor. Luego, gradualmente puedes aumentar la intensidad y la duración de tus actividades físicas.
- Establece metas realistas: Fijar metas realistas y alcanzables es importante para mantener la motivación. En lugar de fijarte una meta de perder 20 kilos en un mes, fíjate metas pequeñas y alcanzables como caminar durante 20 minutos al día durante una semana.