El trabajo de fuerza es clave para nuestra salud. Da igual ser hombres o mujeres, niños o ancianos. La realidad es que si nuestro cuerpo no tiene un mínimo de fuerza muscular enfermaremos más y tendremos menor calidad de vida.
Y aunque esta aseveración la entiende todo el mundo, resulta que a la hora de la verdad no todo el mundo la pone en práctica.
Aún hay el mito de que los niños no pueden trabaja mucho la fuerza y la gente mayor, de la 3era edad, tampoco son muy propensos a trabajarla. Básicamente por 2 razones:
- Por una cuestión de hábitos. Son gente que en su juventud no han ido nunca a un gimnasio o han hecho deporte (de hecho, casi no había gimnasios y no había la cultura deportiva que hay hoy en día)
- Por creer que son prácticas lesivas y que su cuerpo no está hecho para trabajar la fuerza
Y lógicamente es un error. A más edad, más necesidad de trabajar la fuerza. Obviamente teniendo en cuenta la edad y condición física de cada persona.
La 3a edad y la sarcopenia
Según los expertos, empezamos a perder músculo a partir de los 35-40 años y se acelera a partir de los 60. Podemos llegar a perder hasta un 3% de masa muscular por año.
Y es que perder masa muscular es más problemático de lo que parece. Nos afecta a nuestro bienestar, dormimos peor, tenemos muchos problemas articulares y musculares, dolor agudo y crónico, problemas a la hora de hacer ciertos desplazamientos (andando, trotando…) y eso tambien nos repercute mentalmente (ansiedades, depresiones…)