Ahora con la llegada del otoño y después el invierno, muchos de nuestros entrenamientos serán indoors. Bajo techo. A parte de si estos entrenamientos son más o menos aburridos (obviamente para el que le gusta correr o ir en bici al aire libre, hacerlo indoor es muy pero que muy aburrido), siempre tenemos la duda de si estamos trabajando exactamente lo mismo que si entrenáramos al aire libre. La respuesta es no. Si nos centramos sólo en el correr, no es lo mismo correr al aire libre que hacerlo en una cinta de correr.
Correr en cinta implica:
- Correr en la misma superficie de contacto. Al aire libre hay muchas superficies (asfalto, pista, aceras, hierba, tierra…), pero si corremos en cinta, sólo hay una superficie
- El ritmo siempre es el mismo. Si lo quiero cambiar lo tengo que hacer manualmente, pero no tengo la libertad que tengo en el aire libre de poder cambiar el ritmo en un momento dado o de ampliar la zancada si así lo deseo.
- Voy corriendo y la cinta pasa por debajo de mis pies. La técnica no es la misma que cuando corro al aire libre. En el aire libre yo tengo que hacer algo más de esfuerzo en cada zancada para ir avanzando.
Sólo he puesto 3 puntos aunque hay más. Pero son suficientes para ver que no es lo mismo correr en indoor que en outdoor. Pero además hay otra cosa no menos importante: