free web hit counter

Artículos en la categoría ‘Entrenamiento’

¿Es aburrido correr en la cinta?

¿Es aburrido correr en la cinta?

7

Correr en una cinta puede ser lo más aburrido que hay en este mundo (casi tanto como escuchar una partida de ajedrez por la radio). Manel ya nos lo ilustró en un artículo. Si lo leéis veréis que también tiene sus ventajas, y dentro de sus inconvenientes, repito, está el aburrimiento. La cinta se mueve, nosotros nos movemos encima de ella, pero no avanzamos.

Estamos continuamente mirando las mismas cosas, metro tras metro, kilómetro tras kilómetro; nuestro vecino de cinta que está sudoroso, el técnico que pasa una y otra vez por delante nuestro, el otro vecino de cinta que, de reojo, mira a que velocidad vas y también te ves a ti mismo (gracias al enorme espejo que ponen delante de las máquinas de cardio) para que puedas ver como, paulatinamente, te vas enrojeciendo, vas sudando y haciendo muecas, mientras vas pensando lo tonto que puede llegar a ser el ser humano.

A igualdad de condiciones siempre será mejor correr al aire libre. Pero a veces no tenemos más remedio. O porque llueve, o porque hace demasiado calor o porque no tenemos cerca un espacio exterior donde correr…por lo que sea, pero a veces no tendremos más remedio que entrenar encima de una cinta.

Veamos algunas ideas para que el hecho de correr en cinta no sea una cosa tan aburrida+ Sigue leyendo

Correr en solitario, cuando uno solo corre por placer

Correr en solitario, cuando uno solo corre por placer

14

 

Confieso que no he sido nunca un gran corredor. No acostumbro a competir y cuando salgo a correr, lo hago siempre en solitario. ¿Por qué?

  • Primero porque no me gusta ir al ritmo de la otra gente. Yo voy a mi aire según las ganas.
  • Segundo porque siempre improviso. No sé si mañana voy a ir a correr o lo haré pasado mañana. Siempre lo decido en el mismo día. No soy de los que me anoto en la agenda que dentro de 3 días he quedado con alguien para correr (a lo mejor dentro de 3 días tengo ganas de ir a nadar o de jugar un partido de voley-playa).
  • Y por último, porque no sé cuanto rato voy a estar corriendo. Tengo un par de circuitos localizados que hacen 10 kms, pero a lo mejor lo alargo o lo acorto, según ese momento. O me quedo a la mitad y me hago unas series de 50 mts por ejemplo, o  algún Tabata.

Albert, en un anterior artículo hablaba sobre las ventajas de entrenar en grupo. Básicamente las ventajas eran:

  • Más motivación.
  • Entrenar con alguien de tu nivel te ayuda a mejorar.
  • Puedes aprovechar para hacer amigos o charlar de cualquier tema mientras se entrena.
  • Si te ocurre algo durante el entreno, siempre tendrás quien te ayude.
  • Ideal para corredores que se preparan para retos de larga distancia o en su defecto para cualquier reto.

+ Sigue leyendo

Empezar a entrenar para una carrera de larga distancia

Empezar a entrenar para una carrera de larga distancia

49

 

Muchos atletas se quedan a las puertas de las grandes distancias. 10 kms y medias maratones es a lo máximo que llegan. No se atreven con carreras de larga distancia como las maratones y ya no digamos con pruebas de ultra-resistencia (ya sean en llano o en montaña).

¿Qué es lo que nos puede echar para atrás?

  • Demasiados kms de carrera, cosa que significa más días de entreno, más tiempo de dedicación.
  • ¿Podrá mi cuerpo aguantar tal volumen de entrenamiento?

Es lógico tener estas preocupaciones. Pero el cuerpo tiene una capacidad de adaptación impresionante. Sobretodo si le vamos dando los “alimentos” poco a poco.

Sé realista con tus objetivos

Como todo en esta vida hay que seguir una progresión. No empezaremos a multiplicar sin antes haber aprendido a sumar. La progresión podrá ser más o menos rápida (eso ya en función de cada atleta), pero hay que seguirla. Son muchos los atletas que sin haber corrido nunca una carrera me dicen que quieren hacer una maratón. Su único bagaje es correr 2-3 días a la semana 1 hora y se plantean una maratón. Yo como entrenador no me puedo plantear preparar a nadie para una carrera de larga distancia como la maratón, si antes no ha hecho como mínimo una media maratón y lleva un buen volumen de entrenamientos detrás. ¡Ojo! No estamos hablando de hacer una súper marca ni nada por el estilo, pero para entrenar para una maratón se requiere entrenar con unos volúmenes determinados y nuestro cuerpo debe adaptarse a ello. Dicho esto, con 3 días a la semana podríamos prepararnos para hacer una maratón más que digna.

Objetivos realistas, carreras de menos a  más kms e incrementando paulatinamente nuestros días de entreno y sus volúmenes. Ya se encargará nuestro cuerpo de informarnos si vamos demasiado rápidos o no.

+ Sigue leyendo

¿Cómo afrontar una carrera? Estrategias para el día de la competición

¿Cómo afrontar una carrera? Estrategias para el día de la competición

4

 

Normalmente cuando entrenamos es con algún objetivo en concreto. Sobretodo cuando repetimos varias veces una misma prueba y/o distancia. Cuando ya llevamos varias carreras de 10 kms o varias medias maratones, nos empezamos ya a picar un poco con nuestra marca. Queremos bajarla, mejorarla. Cambiaremos un poco nuestros entrenos (a lo mejor entreno un día mas, o hago más series, busco por internet algún método nuevo de entrenamiento…), modifico algo mi alimentación… en fin, intento dar una vuelta de tuerca a mi preparación. Todo, con un solo objetivo: estar al 100% el día de la competición.

Y llega el día de la competición. Me siento bien, estoy fino, he descansado bien, he comido bien y ahora sólo queda transferir todo eso a la competición. ¿Pero, como encaro la carrera? ¿Qué estrategia utilizo? ¿Empiezo despacio? ¿Empiezo a mi ritmo objetivo?

Veamos algunas estrategias que podremos utilizar en carrera.+ Sigue leyendo

21 Días con calzado minimalista (Semana II)

21 Días con calzado minimalista (Semana II)

24

Esta es la segunda semana de una serie de tres (primera semana) en las que mi intención es adaptarme a una nueva forma de caminar y correr. Para ello he sustituido mi calzado tradicional por calzado minimalista a la hora de realizar todas las actividades cotidianas. El propósito es incorporar en el día a día de la manera más imperceptible el fortalecimiento de la musculatura necesaria para este nuevo proceder biomecánico. A pesar de tratarse del comportamiento lógico y natural del cuerpo por su diseño las dos últimas generaciones lo hemos ido evitando y olvidando al usar un calzado excesivamente amortiguador.

Realmente las sensaciones son muy diferentes sin que ello signifique que el cambio es traumático. A día de hoy considero que ha sido un acierto plantearlo de este modo ya que es la manera más progresiva y natural. No voy a negar que, a veces, cuando estoy sacando al perro, empiezo a mirar el suelo con ojos golositos y me pregunto qué se sentirá al caminar completamente descalzo. Tener los pies separados del suelo por cinco centímetros de goma te aísla y te incapacita para sentir lo que te quieren transmitir. Unos pocos milímetros te abren los ojos a la antesala de un nuevo elenco de sensaciones. Y el tiempo de los paseos parece acortarse mientras pienso en todo lo que aun me estoy perdiendo: temperatura, profundidad, charcos, presión, relieve, rugosidad, hierba, tierra, arena… Todas las superficies se presentan como pequeños retos con sus propias características y peculiaridades. Igual que un bebé que despierta a la vida siento que me estoy volviendo muy curioso.

Bajando a un nivel menos metafísico y mucho más práctico y terrenal tengo que confesar que calzarse las zapatillas sigue siendo algo complicado (más el pie izquierdo que el derecho) pero se va viendo algún progreso: ya no se me duermen los dedos al llevarlas puestas.
+ Sigue leyendo

21 Días con calzado minimalista (Semana I)

21 Días con calzado minimalista (Semana I)

55

Cuando uno empieza a entusiasmarse con esto de correr descalzo corre el peligro de querer hacer demasiadas cosas y demasiado rápido pudiendo convertir las buenas intenciones y la ilusión en un proceso traumático y desmoralizador.

Entendiendo que se trata de una reeducación física a muchos niveles y teniendo muy interiorizado que cualquier hábito tarda 21 días en incorporarse a la disciplina personal me plantee cómo podría atacar este pequeño desafío con el mayor pragmatismo sin por ello tener que retener mis ansias de empezar a practicarlo inmediatamente.

Lo más sencillo hubiera sido lanzar las zapatillas por la ventana y salir descalzo a la calle pero, como estoy seguro de que podéis intuir, eso implica un gran número de inconvenientes. Lo más cercano (a mi entender) a correr descalzo son las zapatillas minimalistas. La elección de marca y modelo vino muy condicionada por la dificultad de encontrar tiendas físicas en las que vendan este tipo de calzado pero también por un factor que para mí fue decisivo: los bolsillos para dedos del pie de las Vibram Five Fingers.
+ Sigue leyendo

Qué me impulsa a correr descalzo

Qué me impulsa a correr descalzo

44

 

Mi historia no es muy diferente a la de tantos otros que pasáis por aquí. De hecho seguro que cuando leáis los próximos párrafos os sentiréis en algún punto que otro bastante identificados. Mi perfil como deportista responde perfectamente a esa palabra que hemos adoptada del francés como si fuera nuestra: amateur. Principiante, aficionado, muy por detrás de los registros de las bestias pardas que frecuentan este blog y muy cercano a ese atleta popular que aparece en las carreras de cinco y diez kilómetros los domingos por la mañana.

Mi historial deportivo siempre ha ido muy ligado al baloncesto a pesar de haberme quedado clavado desde hace bastantes años en el 1,73m. He tenido algún escarceo con el fútbol más o menos serio y he jugado casi cualquier cosa que implique tener una raqueta en la mano. Para mí el deporte no se entendía sin una pelota o un equipo al que pertenecer y otro contra el que competir. Pero, como comentaba, una genética no excesivamente idónea para la práctica del baloncesto me hizo desistir hace ya años de intentar ir más allá y, como casi todos, acabé apuntándome a un gimnasio ya que parecía la única forma de mantenerse en forma pasada la adolescencia. En mi primera etapa encontré un gran profesional que me asesoró y me enseñó como nadie ha sabido hacerlo desde entonces y por ello he acabado muy desangelado de esa pretendida salud enlatada que venden las grandes cadenas de gimnasios.

Sin baloncesto, sin gimnasio, sin deporte.
+ Sigue leyendo

¿A qué hora debo entrenar?

¿A qué hora debo entrenar?

12

 

Hoy en día, debido a nuestro ritmo de vida (laboral, familiar…) nos es difícil poder escoger a qué horas entrenar. Sencillamente entrenamos a la hora que podemos y muchas veces, de un día para otro, no sabemos si podremos entrenar a una hora o a otra.

Y como nosotros mismos somos quienes nos conocemos mejor, sabemos que hay unas horas en las que estamos más predispuestos a entrenar y/o rendir mejor.

Entrenar yo lo asemejo a estudiar. Por más que me ponga delante de los libros si no estoy por lo que tengo que estar y no me siento a gusto, por más que me ponga a leer no me va a entrar nada en la cabeza.

¿Qué es mejor? Ir hoy al gimnasio aunque no tenga muchas ganas y entrenar al 60 o 70% o esperar a mañana o pasado que a lo mejor cogeré el entreno estando más motivado y podré entrenar al 100%?

Es de suponer que cada uno sabe cuáles son las horas en las que su cuerpo está más activo, más presto a asimilar cualquier estímulo. Si digo que de media mañana hasta media tarde, es cuando el cuerpo tiende a recibir mejor cualquier estímulo, la mayoría estaremos de acuerdo. Tanto para entrenar, como para estudiar, como para cualquier tipo de actividad.+ Sigue leyendo

Pesas + intensidad: adelgazar es posible

Pesas + intensidad: adelgazar es posible

123

 

La mayoría de gente que busca ponerse en forma, trabaja (entre otras cosas), con las pesas. De métodos de trabajo con las pesas hay muchos, son infinitos y una vez tengamos un mínimo de experiencia los podremos adaptar a nuestras necesidades. Con las pesas podemos trabajar muchos objetivos. Los deportistas los utilizan para rendir más y mejor en su disciplina. Para ser más explosivos (saltos, lanzamientos, tiros…), para ganar más fuerza máxima (halterofilia), más resistencia (natación, ciclismo, running…), para ganar agilidad, flexibilidad…

En función de ello utilizaremos un método de trabajo u otro y podremos hacer una planificación en función de nuestra temporada. Pero si lo que buscamos es un objetivo puramente estético, saludable, de perder peso, de verse definido, la cosa cambia un poco. Aquí ya no nos importan tanto el tener más fuerza máxima ni el ser un poco más explosivo. Lo que estamos buscando es un cuerpo más fuerte (que no necesariamente grande). Y un cuerpo fuerte, quema más calorías durante las 24 horas del día. Y eso nos ayuda a adelgazar. Nuestra estructura muscular, tendinosa, ligamentosa, se hace más fuerte, más resistente, más dura, y tiene que liberar más energía para mantener todo ese tono y eso es lo que hace que quememos más. En definitiva, estamos aumentando nuestro metabolismo basal, el de reposo (que es el que disminuye en tanto que vamos cumpliendo años). Una buena estructura muscular es lo que evitará que engordemos de mayores y de paso nos ayuda a adelgazar.
+ Sigue leyendo

Ganar en autoconfianza, ganar en control

Ganar en autoconfianza, ganar en control

2

 

En los deportes de resistencia, lo más importante, valga la redundancia, es tener resistencia. Si yo soy resistente, si tengo aguante, llegaré lejos. Ahora bien, un buen dominio técnico nos permitirá optimizar nuestra capacidad muscular y pulmonar. Unas buenas sesiones técnicas de carrera o de natación nos pueden hacer mejorar y mucho en nuestros retos.

Pero no todos los deportistas están abiertos a mejorar técnicamente. En deportes colectivos nos parece de cajón el tener que mejorar la técnica (un remate, un chut, un regate, un smash…), pero cuando hablamos de la carrera, la bici, la natación…, hay deportistas reacios a ello. Algunos dirán que tienen una técnica “particular” y que ya les va bien. Les va bien pero claro, tampoco la pueden comparar con nada porque son reticentes a aprender otra “técnica”. Tampoco se trata de aprender la técnica más estándar de cada cosa. Un buen entrenador nos hará cambiar lo justo, atendiendo a nuestras peculiaridades, para poder mejorar sin que ello conlleve un estrés añadido a nuestro cuerpo.

La mayoría de triatletas, por ejemplo, tienen en la natación como el tramo más complicado puesto que el agua no es el medio natural para ellos. Pues bien, al  cabo de unas cuantas triatlones realizadas, es cuando deciden ponerse en manos de un entrenador de natación y ven que con unas pocas sesiones de técnica de crol, pueden mejorar lo inimaginable en este tramo. Una buena técnica me permite rendir mejor, cansándome menos. + Sigue leyendo